El Congreso español aprueba la ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario.

La anticipada convocatoria de elecciones generales ha paralizado la futura ley contra el desperdicio alimentario, pendiente de su aprobación final.

Se suspende la tramitación de la ley de prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario ante el adelanto de las elecciones generales al 23 de julio. Se trata de una de las principales normativas relativas al sector agroalimentario que quedan paralizadas tras la disolución de las Cortes Generales.

¿En qué consiste este proyecto de ley?

La norma obliga a las empresas de la cadena alimentaria a tener un plan de prevención para minimizar las pérdidas y el desperdicio de alimentos, así como destinar los alimentos a otros usos, con prioridad para el consumo humano.
• Reconoce el derecho de los consumidores a llevarse lo que no han comido y obliga a los establecimientos de hostelería y restauración a facilitarles envases aptos o reciclables gratuitos.
• Fija un régimen sancionador que establece como falta grave no contar con un plan de prevención de las pérdidas y el desperdicio de alimentos. Las penalizaciones oscilan entre 2.001 y 60.000 euros.

Objetivos de la ley contra el desperdicio de alimentos

Esta iniciativa legislativa, que continuará su tramitación en el Senado para su aprobación final, tiene como objetivos:

Prevenir y reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos por parte de todos los agentes de la cadena alimentaria.
Promover la economía circular y la concienciación social.
Establecer una jerarquía de prioridades de solución y dar respuesta al objetivo sobre producción y consumo responsables de la Agenda 2030.

Cada año, 1.300 toneladas de alimentos acaban en la basura y 3 de cada 4 españoles tiran comida en su casa. Ante estas cifras alarmantes, la ley fija una reducción del 50% de los residuos alimentarios per cápita en la venta minorista y el consumo, así como disminuir un 20% la pérdida de alimentos a lo largo de la cadena de producción y suministro para 2023, respecto a 2020.

Aspectos a tener en cuenta del proyecto de ley contra el desperdicio alimentario

1. ¿Quiénes deben cumplir la ley? Todos los que participan en la cadena alimentaria• Los operadores del sector primario: cooperativas y empresas de elaboración y distribución de alimentos

• Comercios al por menor
• Empresas de hostelería y restauración
• Entidades del tercer sector
• Entidades sociales
• Bancos de alimentos
• Administraciones públicas

2. Plan para evitar el desperdicio: todas estas empresas deberán tener un plan de prevención de desperdicios de alimentos y donar o redistribuir los alimentos que no se vendan.

3.Jerarquía: estos planes deben seguir un orden de prioridades, siendo la primera el consumo humano a través de la donación o redistribución de los alimentos:

  • Consumo humano: los que donen o reciban alimentos deben acordar cómo se recogen, transportan y almacenan entre ambas partes. Además, las entidades sociales (ONG’s o bancos de alimentos) deberán llevar un registro de entrada y salida de los alimentos y comprometerse a no venderlos.
  • Transformación de los alimentos: si los alimentos no se pueden vender pero pueden consumirse se deberán convertir en otros productos como mermeladas o zumos.
  • Alimentación animal: si los alimentos no son aptos para las personas, se destinarán para la fabricación de comida animal.
  • Otros usos: si los alimentos no se pueden usar para nada de lo anterior (consumo humano, alimentación animal o transformación), se pueden aprovechar para hacer subproductos, compost, biogás o combustible.

La ley permite adaptar esa jerarquía según las características del sector por razones técnicas, de seguridad o económicas.

4.Restaurantes: todos los restaurantes, excepto los buffets libres, deberán ofrecer gratis a sus clientes la opción de llevarse la comida que no han consumido. Para ello, deben tener envases adecuados para el consumo o que puedan reciclarse fácilmente.

5.Alimentos imperfectos, pero consumibles: para aprovechar los alimentos antes del fin de su vida útil, las empresas que venden productos alimentarios al consumidor deberán promover la venta de productos con imperfecciones y fomentar los alimentos con una fecha próxima de caducidad.

5.Multas: si se incumplen las obligaciones y disposiciones de la ley, la sanción puede llegar a los 60.000 euros, según la gravedad de la falta. La Ley establece como falta grave no contar con un plan de prevención para reducir pérdidas y desperdicio alimentario.

Novedades

La futura ley contra el desperdicio alimentario ha incluido algunas novedades durante su proceso en la comisión de Agricultura:

• Los pequeños supermercados quedan fuera de la obligación de donar excedentes, salvo que pertenezcan a un mismo grupo fiscal y superen el límite de 1.300 metros cuadrados.
• Las microempresas no tienen que tener un plan de prevención de pérdidas.
• Las empresas que proveen alimentos a instituciones públicas deben cumplir con unas prácticas adecuadas contra el desperdicio.
• Las entidades sociales y sin ánimo de lucro que donan alimentos no son responsables de los posibles defectos de estos, salvo que sean por negligencia o incumplimiento legal.

Próximos pasos: Senado y publicación en el BOE

El proyecto de ley contra el desperdicio de alimentos se encuentra actualmente paralizado. Si las nuevas Cortes elegidas en las próximas elecciones aprueban enmiendas vuelve al Congreso y si no hay cambios se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y entrará en vigor.

¿Un desafío o una oportunidad?

Esta ley está a un paso de ser realidad y puede resultar ser un auténtico desafío para las empresas alimentarias, ya que tendrán que adaptarse a la nueva normativa y cambiar sus hábitos y procesos para evitar el desperdicio de alimentos. Sin embargo, también supone una oportunidad para aumentar la rentabilidad.
Pero esto solo es posible a través de la tecnología y un sistema diseñado contra la pérdida de alimentos como Smartway.

SMARTWAY te ayuda a cumplir la ley contra el desperdicio alimentario, superar los retos y aprovechar las oportunidades que se presentan

Smartway es una herramienta integral de soluciones innovadoras que te garantizan reducir pérdidas de alimentos y, al mismo tiempo, aportan muchas ventajas para tu empresa:

Optimizar la gestión de tus productos
• Agilizar tus procesos
• Mejorar la productividad y la eficiencia de tus operaciones
• Aumentar tu imagen de marca
• Generar un impacto positivo en la sociedad y en el medio ambiente.

Smartway le ayuda a establecer un enfoque antiresiduos eficaz e inteligente que le permite ahorrar tiempo a diario.